Con finalidad de transformar lo malo aunque deba inventar un Mundo Mejor.

Myriam Covián, Integridad de artista

Myriam Covián nació en Oviedo. Asturias. (1966). Pintora abstracta, Poeta y escritora. de pequeños relatos y reflexiones cuya única

(Especial para El Diario de Carlos Paz)

 

Myriam Covián

 

Cada persona posee en su interior la capacidad de embellecer este magnífico y extraordinario mundo llamado Planeta Tierra. Usted, el señor o la señora que repara los zapatos con los que movernos; el lejano y despistado canto de alegría junto a un riachuelo mientras la mente se calma o quizás (y más correcto), las mentes que ya calmadas apaciguan al resto desde sus pequeñas y grandes posibilidades innatas.

De esas natas golosas surge un azúcar limpio, sin veneno, transparente y carente de egoísmo. Asoma el buen hacer, el buen sentir por el buen pensar. 

Toda inteligencia es válida siempre que se una a las buenas voluntades de un fin conjunto, noble, sencillo, sincero, no agotado ni explotado, no gobernante ni gobernado.

Cada pequeñísima muestra de honradez humana, de dignidad, de amor, es eso... Amor.

No existe nada superior. Tenemos el problema de no saber qué es o cómo definirlo, tampoco sabemos usarlo, sólo somos capaces de apreciarlo cuando nos impregna sin saber ni cómo.

No importa cuantas veces se haya desperdiciado, ni cuantas más nos haya rozado levemente, pues eso es, una especie de levedad que impregna cuanto toca o traspasa. En ocasiones se tarda una vida entera en sentir esas caricias de belleza.

Discutimos, opinamos, reflexionamos, estudiamos, interpretamos y hasta sentimos, pero erróneamente.

Creemos que la desesperanza es perpetua, que nada cambia cuando ya ha transmutado cuanto éramos y somos. 

Esa es la verdadera labor de todo artista y usted se encuentra en nuestro grupo. 

 

 

Mujer azul en silla roja

 

  Mis dibujos invadiendo un bodegón

     El jardín de los parásitos

 

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